El Gobierno nacional anunció ayer un incremento de entre 60% y 148% la tarifa de la energía eléctrica a casi un tercio de los habitantes del país. Alcanzará a los pobladores del Área Metropolitana de Buenos Aires, donde residen unos 13 millones de personas. En una conferencia de prensa, el ministro de Energía Juan José Aranguren mencionó que a partir de la medida el 83% de los usuarios recibirá una factura con una suba máxima de $ 183.
El aumento comenzará a regir desde hoy, aunque recién se pagará en marzo próximo, “a fin de contribuir a una menor carga en los bolsillos” de los usuarios, indicó Aranguren. El funcionario reiteró que el Gobierno asumió hace más de un año una situación de “emergencia eléctrica”, por lo cual los incrementos en la tarifa procuran generar “inversiones para normalizar el sector”.
En octubre pasado, luego de un período de audiencias públicas ordenado por la Corte Suprema de Justicia, el Ministerio de Energía había aumentado también las tarifas de gas entre 300% y 500% para usuarios residenciales, comercios e industrias. Durante 2016 el Gobierno había dispuesto incrementos en la luz y el gas superiores al 700%, pero diferentes recursos legales presentados por los usuarios y aceptados en la Justicia derivaron en una disminución de los aumentos, que fueron aplicados en cuotas para que no representaran un gran impacto en la economía de los argentinos, consignó la agencia DPA.
Si bien en Tucumán se espera establecer los pormenores de la decisión adoptada ayer por el Gobierno nacional, voceros de la Empresa de Distribución Eléctrica (EDET) diferenciaron el anuncio nacional del reajuste que fue avalado por el Gobierno local en diciembre pasado y que comenzará a regir a partir de abril. Por lo tanto, los usuarios de la provincia observarán en las boletas tres reajustes en los valores a aplicarse este mes, en marzo y en abril. Los dos primeros corresponden al aumento de precio estacional -que en cifras preliminares serían del 15% para este mes y del 20% para marzo-, mientras que el tercero, que será de 25%, es el referido al Valor Agregado de Distribución (VAD), que tendrá vigencia hasta 2020, pero con reajustes semestrales por inflación. Éste último será aplicado desde el 1 de abril próximo.
Según EDET, los tres reajustes no serán de aplicación integral, ya que una amplia franja de usuarios residenciales pagará un reajuste menor o directamente no será alcanzado por el sinceramiento de tarifas. La distribuidora indica que se trata de los 165.000 clientes que gozan la tarifa social sobre un total de 450.000 usuarios residenciales de Tucumán.
Durante la conferencia de prensa de ayer, Aranguren presentó los alcances de la revisión integral de las tarifas del servicio eléctrico. Según el trabajo exhibido por la cartera de Energía, con los reajustes que se aplicarán, Tucumán quedaría entre los cinco de los 24 distritos del país con menor impacto de la reducción de subsidios en las facturas que reciben los usuarios.