El Gobierno Argentino asegura que la presentación realizada por la Cámara estadounidense que nuclea a productores de biodiésel para analizar la continuidad del ingreso de biocombustible argentino a ese país no tiene sustento.
El 23 de marzo una coalición de la industria estadounidense del biodiésel liderada por la Junta Nacional del Biodiesel (National Biodiesel Board o NBB) solicitó al Departamento de Comercio y a la Comisión de Comercio Internacional de ese país la imposición de derechos antidumping y compensatorios contra las exportaciones argentinas de biodiesel.
Los peticionantes acusan a los productores argentinos de exportar biodiesel a precios de dumping y de beneficiarse de subsidios distorsivos que favorecen a las exportaciones perjudicando a la industria norteamericana. Las acusaciones de la industria estadounidense no tienen ningún sustento.
La demanda sobre supuesto dumping no cuenta con evidencias y sus argumentos ya han sido rechazados por tribunales internacionales. La OMC falló en favor de Argentina el año pasado, tanto en primera instancia como en apelación, contra una medida antidumping similar a la que ahora pretende la industria del biodiesel estadounidense impuesta por la Unión Europea.
La medida europea declarada ilegal estaba basada en los mismos argumentos que ahora reitera la industria estadounidense. Además, la Corte General europea anuló los derechos antidumping impuestos por la UE dando por tierra con la acusación de sus propios productores. En este momento la UE se encuentra revisando su medida.
Asimismo, respecto a los supuestos subsidios, la acusación de los productores de biodiesel de los Estados Unidos se basa en argumentos carentes de todo sustento. La misma Unión Europea también rechazó una acusación de sus propios productores, similar a la presente demanda de la industria norteamericana, dado que no pudo probarse la existencia de subsidios que supuestamente favorecían a los productores argentinos.
La Argentina es líder mundial en producción de biodiesel gracias a su ventaja comparativa en la producción de la soja y la producción altamente eficiente de la industria nacional de biodiesel. Esto motivó demandas proteccionistas en diversas partes del mundo con el fin de proteger sectores incapaces de competir internacionalmente a través de la imposición de barreras ilegales al comercio internacional. Dichas barreras no solamente perjudican a los exportadores eficientes, sino que menoscaban los esfuerzos que realizan los países en desarrollo para proteger el medio ambiente global a través de la reducción del consumo de combustibles fósiles.
El gobierno argentino brindará su apoyo a los productores argentinos y continuará bregando por un comercio internacional de biodiesel libre de barreras, que premie la eficiencia y la protección del medio ambiente.