Si bien el tiempo le jugó una mala pasada a gran parte del país, incluso a San Juan, la tormenta allí fue tan intensa que transformó las principales calles y avenidas de la ciudad en verdaderos ríos que arrastraban todo a su paso, incluso vehículos.
Los barrios más afectados fueron San Cayetano, Moure y Ceferino, según describió el jefe de la seccional cuarta de esa ciudad, Daniel Mellado. El comisario inspector dijo que allí se registraron evacuados pero en un número que no pudo precisar.
Pasadas las siete de la tarde la lluvia declinó en su intensidad y las aguas bajaron rápidamente dejando a su paso barro, árboles tirados y mampostería arrastrada por la corriente.
La presidenta de la junta vecinal del barrio La Floresta de la ciudad petrolera, Silvia Navarro, también describió la situación de angustia que ellos viven con lugares a los que todavía no pudieron acceder producto del lodazal que se formó. “Por suerte se limpiaron todas las bocas de tormenta y el agua escurrió” describió Navarro en diálogo con Radio Chubut.
En esa asociación, como en otras sedes que están distribuidas en la geografía comodorense, permanecerán en vigilia mientras se mantengan las condiciones de alerta meteorológica.
