Los Simpsons tienen a “Ayudante de Santa”, Mickey tiene a Pluto y Jon tiene a Garfield. Las mascotas ocupan un lugar vital en la historia de cada persona pero, muchas veces, se priorizan los deseos y comodidades de los propietarios y no del animal. Uno de los puntos más importantes es diferenciar qué mascotas son aptas para departamentos y cuáles no. Para determinarlo, Entremujeres consultó a Diego Rébola, médico veterinario.
El especialista comentó que casi la totalidad de pacientes que ve en la Ciudad son perros y gatos. En territorio porteño no se popularizaron demasiado modas que incluyan cobayos o cerdos vietnamitas, como los de las estrellas de Hollywood.
En cuanto a los felinos, “el 80% de los gatos son mestizos”. El resto de los que visitan su consultorio, siameses y persas. Asimismo, el médico cree que la tendencia apuntará cada vez más hacia los ases del maullido, quienes se acomodan fácilmente, ya sea en monoambientes como en propiedades más grandes.
En el caso de los canes, Rébola cree que uno de los principales temas a tener en cuenta es que “no es el perro quien debe adecuarse a los propietarios, sino al revés”. Partiendo de esta idea, sostiene que la vida en departamentos o espacios reducidos es para perros de razas pequeñas. El especialista mencionó que las más comunes entre sus pacientes (además de los mestizos) son el caniche, el bulldogs francés, el schnauzer y el maltés.
Sin embargo, aunque el tamaño sea importante a la hora de elegir este amigo de cuatro patas, no es la única característica a tener en cuenta. Rébola menciona que, por ejemplo, la raza Jack Rusell (la del perro de la película “La Máscara”) no es recomendable porque, si bien son chiquitos, son animales hiperactivos.
En tanto, el médico sostuvo respecto al cuidado de estos perros que se adaptan a departamentos: “Necesitan el compromiso de la gente, hay que sacarlos a pasear entre dos y tres veces al día”. El veterinario explicó que, de no cumplir, estas mascotas comienzan con problemas como “uñas largas, aumento de peso y mal comportamiento”. Y, tanto en perros como en gatos, tener muy en cuenta la higiene.
Finalmente, Rébola recomendó que “el propietario debe prepararse y asesorarse en la veterinaria, ya que todo depende de ellos”. Según él, “cada perro es como uno lo cría”.