El gobierno de Entre Ríos oficializó hoy la declaración de situación de "emergencia agropecuaria" en la provincia mesopotámica a causa de la sequía que afecta a la región.
El período se extiende por un año a partir del 1 de marzo y los productores afectados tendrán un plazo de 60 días corridos para gestionar los beneficios que comprende la medida.
A través de la publicación en el Boletín Oficial del decreto Nº 373 con fecha del 12 de marzo, el Ministerio de Hacienda entrerriano decretó el "estado de emergencia para la producción agrícola, lechera, ganadera, citrícola, frutícola, hortícola, forestal y apícola".
La Secretaría de Producción "coordinará la recepción de las declaraciones juradas", verificará "los daños producidos" y posteriormente emitirá "certificados individuales" de emergencia, para generar un listado de productores para la Administradora Tributaria de Entre Ríos (ATER).
Asimismo, ATER prorrogará "el vencimiento del Impuesto Inmobiliario Rural y Subrural, en sus modalidades de pago anual y/o anticipos", con fecha "posterior al 31 de agosto de 2018, sin multas ni intereses".
Estas obligaciones tributarias podrán ingresarse "en hasta cuatro cuotas mensuales y sin interés de financiación", con el vencimiento de la primera cuota el 10 de enero de 2019, y las restantes vencerán el mismo día de los meses subsiguientes hasta su cancelación".
Para acceder a los beneficios, los productores afectados deberán presentar "una Declaración Jurada conforme los formularios que determine la Secretaría de Producción dentro del plazo de 60 días corridos".
La medida se tomó debido a que "la falta de lluvias registradas y los bajos niveles de reservas hídricas se han mantenidos constantes en los últimos meses" en Entre Ríos, señala el decreto.
"La prolongada sequía ocasionó graves daños en los distintos sistemas productivos que provocó significativas pérdidas económicas", y también incidió "desfavorablemente sobre la capacidad productiva de las explotaciones rurales"