El ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, visitó Posadas para inaugurar los nuevos puentes sobre el Arroyo El Zaimán y firmar un convenio para poner en marcha desde comienzos del 2017 la anhelada obra de la autovía Santa Ana-San Ignacio.
El funcionario nacional volvió a reiterar, como lo había hecho en visitas anteriores, que el Gobierno Nacional tiene en carpeta obras para la provincia por 8000 millones de pesos, en su gran mayoría ($6000 millones) de obras viales. El resto en otros proyectos entre los que se destacan las reformas integrales de los aeropuertos de Iguazú y de Posadas.
Sin embargo, más allá de los planes y las obras en carpeta, lo concreto es el comienzo para el año que viene de la obra Santa Ana-San Ignacio que demandará casi tres años de trabajo y una inversión de 430 millones de pesos, según afirmó Dietrich.
Además, el ministro destacó los 105 kilómetros de rutas que se están haciendo en este momento en la provincia a cargo de la Nación y que incluyen la ruta 221 y la ruta 8, que son obras que ya venían proyectadas y se estaban haciendo desde la anterior gestión.
Es decir, más allá de los planes de obras millonarias, lo cierto es que la reactivación de la obra pública con fondos nacionales todavía es a cuentagotas y está lejos de alcanzar para devolver los niveles de empleo en la construcción a los 14.000 puestos de trabajo registrados de octubre pasado.
De todas formas, si es por el discurso de Dietrich -que exhibió una buena afinidad personal no solo con Passalacqua sino tambien con el intendente Losada durante el acto-, el futuro es promisorio para la provincia de Misiones.
