La peste porcina africana es un virus muy agresivo que, desde principios de siglo, afecta a ese continente. Luego, se fueron dando brotes en diferentes partes del mundo y el último se vio en China, siendo más que potente. Es que, justamente, el gigante asiático genera el 50% de la producción mundial de cerdos.
Muchos países están preocupados por la posible expansión de la peste, explica Daniel Fenoglio, presidente de la Asociación Argentina de Productores Porcinos, en diálogo con Radio Campo -por Radio Colonia- donde advierte que diferentes naciones han tomado medidas similares.
Estados Unidos, por ejemplo, suspendió la exposición de cerdos de Iowa, que es la más grande del mundo, y en esa línea es que el Senasa tomó la decisión o el recaudo y suspendió la aparición de animales en exposiciones argentinas.
Lo que se busca, explica, es evitar la concentración de animales, sobre todo ejemplares que -como en el caso de los que asisten cada año a La Rural de Palermo- no van luego a faena sino que van a cabañas o productores.
Si bien admite que la sanidad es buena en Argentina, sostiene que por el evento de Palermo pasan millones de personas, y entre ellas muchos extranjeros. Como la peste puede contagiarse a través del aire, de un objeto o de un alimento contaminado, hay posibilidades de contagio en ese lugar.
Entonces decidieron prevenir con esta medida, que para Fenoglio es “muy valiosa e importante, por eso recibió la colaboración de todo el sector”. Lo que no tiene es plazo de finalización, porque falta mucho para que se aclare el panorama, mientras siguen apareciendo casos en Europa del Este, en Estados Unidos con alimentos contaminados en el aeropuerto, y más. Por eso, las medidas continuarán hasta que el organismo sanitario nacional lo considere necesario, concluyó.