Laboratorios Craveri creó en 2016 Bio Ingeniería en la Fabricación de Elaborados (BIFE) la start up que utiliza la "agricultura celular" como alternativa a la elaboración de alimentos de origen animal mediante cultivos celulares.
El proceso de la carne cultivada es novedoso ya que no está modificada genéticamente, sino que es producto de la multiplicación in vitro de las mismas células que producen la carne en el animal.
"Se le hace una biopsia al animal sedado, por lo que no sufre en ningún momento. Luego, lo llevamos al laboratorio y cultivamos el musculo, dejamos que las células se reproduzcan naturalmente. Allí le damos el medio que se encuentra en un ambiente ideal similar a la temperatura corporal del animal", explicó Juan Craveri, fundador de B.I.F.E a Agrolink Radio.
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El proceso de cultivación dura aproximadamente cuatro semanas. "El color de la carne cultivada es un rosa pálido, debido a que no tiene sangre ni grasa", indicó Craveri. Uno de las primeras decisiones para finalmente concretar la idea, fue que hace décadas se triplicó el consumo de carnes en los humanos debido a la sobrepoblación que hay en el planeta Tierra.
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B.I.F.E lleva a cabo la denominada "agricultura celular" que trata la intersección entre las ciencias de la salud y la producción de alimentos, tomando las herramientas y conocimientos de la ciencia para aplicarla en la nueva elaboración de un alimento. Desde la entidad, afirman que se consolida para llevar una solución al problema de la falta de alimentos para la población futura y la elaboración sustentable de productos alimenticios de origen animal a partir de cultivos celulares que no requieran del sacrificio animal.
Además, hasta una persona vegana podría consumir, porque, en este caso, "no se está lastimando al animal ya que le hacemos una pequeña incisión totalmente sedado y no sufre. Se lo cose y sigue con vida".
La primera degustación de carne cultivada
"La primera degustación de carne cultivada fue el 2 de julio, con una carne picada. Aunque la tuvimos que sazonar ya que al no tener grasa no le da el mismo sabor", explicó Juan.
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Aunque sigue siendo un producto novedoso y para algunos desconocido, según el fundador, un público mayor de 50 años es más difícil de que acepte comer la carne cultiva "porque a ellos la comida les entra por los ojos y quieren un bife tal cual es", mientras que la generaciones más jóvenes "son más conscientes del dolor que se somete el animal y los efectos en el planeta Tierra y serían más permeables al probarla".
¿Cuándo saldrá al mercado?
"Entre cinco a 10 años podría salir a la venta, porque todavía se sigue trabajando desde el sabor de la misma y esperando que salga todo tipo de regulación para insertala al mercado", finalizó Craveri.
