Un proyecto impulsado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación y llevado a cabo por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) en conjunto con las Universidades del Nordeste (UNNE), Salta (UNSa) y Santiago del Estero (UNSE) pone en valor las potencialidades y los futuros posibles para que la región norteña del país cumpla con la Agenda 2030.
El proyecto se titula "Bioeconomía argentina: Construyendo un futuro inteligente y sustentable para el Norte argentino 2030" que fue ejecutado a partir de junio de 2018. La bioeconomía está basada en el consumo y en la producción de bienes y servicios derivados del uso directo y la transformación sostenible de recursos biológicos renovables y desechos biomásicos, que se generan en los procesos de transformación, producción y consumo de la sociedad.
Para Roberto Bocchetto, director del Proyecto y profesional asociado del INTA, "las regiones del Norte argentino presentan materias primas biológicas disponibles per se, o resultantes de otros procesos, y actividades productivas para la obtención de productos de mayor valor agregado".
"Si se pone atención a la potencialidad del desarrollo de las plataformas de biorrefinería por provincia, se deduce que aquellas que presentan mayor desarrollo productivo o abundancia y diversidad de biomasas son las que mejor posicionadas están para fortalecer dichas plataformas en el corto plazo", explicó el director del proyecto.
Respecto de las potencialidades para desarrollarse productivamente bajo el marco de la bioeconomía, Bocchetto destacó que "en cada territorio estudiado se encuentran centros de investigación dedicados a las biomasas particulares de la región, que cuentan con grupos de excelencia insertados dentro del sistema científico-tecnológico y, en la mayoría de los casos, con buena vinculación al sector productivo".
Según Diego Gauna, coordinador del área de prospectiva del Centro de Investigación en Economía y Prospectiva del INTA e integrante del equipo núcleo del proyecto, "esto abre una oportunidad para dar respuesta a los obstáculos tecnológicos provenientes de los procesos y las calidades que requieren los mercados", pero aseguró que, aun así, "es necesario potenciarlos a través de los vínculos entre los sectores público y privado, con políticas de incentivos a mediano y largo plazo".
En el norte argentino, ciertas cadenas de valor poseen potencial para fortalecer el perfil bioeconómico de la región, aunque las capacidades más significativas son a nivel de la producción primaria y más insuficientes a nivel del desarrollo industrial.
"Las oportunidades de la mayoría de las cadenas priorizadas se asocian con una importante contribución al desarrollo de la economía circular, a través del aprovechamiento de los residuos de la producción agrícola, pecuaria y de plantas procesadoras", indicó Gauna para quien existen actividades agropecuarias y forestales en la Región Norte que permiten superar limitantes que normalmente se encuentran en la cosecha, densificación, transporte y almacenamiento de la biomasa con fines bioenergéticos.
"Al mismo tiempo, las condiciones naturales y la capacidad institucional y científico-tecnológica, abren oportunidades para obtener nuevos productos biobasados que impulsen el desarrollo regional", aseguró. Por otra parte, Gauna sostuvo que en el "norte argentino existen capacidades científico-tecnológicas en aspectos básicos y aplicados de ciertos bioinsumos, con una variedad de sistemas productivos, cultivos y plagas que hacen factible el desarrollo de biofertilizantes, bioinsecticidas y biofunguicidas, entre otros".
El proyecto de la Bioeconomía del Norte argentino
"El estudio se planteó el desarrollo de un diagnóstico y ejercicio de prospectiva sobre la Bioeconomía del Norte argentino, que permitiera identificar tendencias, futuros posibles y áreas de intervención del gobierno nacional y territorial en el ámbito de la ciencia, tecnología e innovación", explicó Bocchetto.
De acuerdo con los primeros resultados, "las principales potencialidades del norte argentino para el desarrollo de la bioeconomía están relacionadas con la dotación de sus recursos biomásicos, la presencia del conglomerado sucroalcoholero y la densa trama territorial de la agricultura familiar", aseguró Bocchetto.
Asimismo, Bocchetto detalló que "el Norte Grande dispone de una amplia y densa estructura científico-tecnológica de educación y formación profesional como base de partida para consolidar las capacidades que requiere una estrategia de industrialización biológica".
"Algunas políticas públicas de bioeconomía a nivel mundial han sido diseñadas sin tener en cuenta las limitaciones locales y tiempos lógicos, pero, además, existe una falta de conexión entre las políticas y los actores bioeconómicos", señaló Bocchetto, y agregó: "La matriz bioeconómica de la Región Norte no posee un patrón homogéneo, sino que presenta distintos perfiles productivos, diferentes escalas y biodiversidad de recursos disponibles".
En esa línea, el especialista aseguró que "la transición hacia la bioeconomía como paradigma del desarrollo requiere diversas intervenciones de políticas públicas específicas que partan de las condiciones mismas del contexto y de las necesidades de sus actores" y especificó que "es necesario diseñar un plan estratégico sustentado en conocimientos tecnológicos y de innovación, articulados por formas de organización en redes, cadenas de valor, plataformas y procesos de economía circular de base biológica, interconectados y transversales".
Fuente: INTA Informa