Del encuentro, realizado en la sede del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), participaron el secretario de Coordinación y Desarrollo Territorial, Santiago Hardie, y el subsecretario de Agricultura, Luis Urriza, en representación del Ministerio de Agroindustria de la Nación.
En la reunión se avanzó sobre los tres temas planteados, “pero lo vamos a analizar punto por punto para poder implementarlos de la manera mas eficaz y sin perjudicar a ningún sector de la cadena productiva”, anticipó Urriza.
Para Urriza, los avances son concretos y están direccionados a medidas tendientes a “mejorar la situación económica del sector, orientadas fundamentalmente a garantizar la fiscalización y el cumplimiento del precio de la materia prima”.
Por su parte, funcionarios y técnicos de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y de la Dirección General de Rentas de Misiones relevaron los datos económicos y financieros y se comprometieron a implementar mecanismos que permitan la transparencia de las operaciones de compra y venta de la hoja verde y de la yerba mate canchada.
Sin embargo, los productores no quedaron conformes y anticiparon que la decisión de comenzar la cosecha quedará “a la voluntad y el criterio de cada productor y de los tareferos”, según afirmó el presidente de la Asociación de productores Zona Norte, Julio Peterson.
El principal contrapunto se produjo a la hora de discutir el monto que destinará la Nación a través de Fondar para financiar el pago de la cosecha a través del Banco Nación.
Los productores sostienen que el compromiso asumido la semana pasada por parte de los funcionarios del Ministerio de Agroindustria era de $1.500 millones.
Sin embargo, Urriza aclaró hoy que esos fondos están disponibles “pero no sólo para la yerba mate, sino para las 14 economías regionales del país”.
El funcionario agregó que la cifra a destinar al financiamiento de la yerba mate se establecerá luego de una serie de estudios en base a la información solicitada al INYM.
Tras esta aclaración, desde el INYM propusieron postergar el inicio de la zafra hasta abril, lo que no fue aceptado por los productores “porque tanto los tareferos como los pequeños productores están pasando realmente mal y necesitan plata ya para poder comer”, según Peterson, quien no descartó nuevas medidas de fuerza en paralelo al inicio de la cosecha.
Productores Misioneros comienzan la cosecha de yerba mate, pero mantienen los reclamos
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