En vez de sistemas de misiles, el submarino atómico estará equipado con robots y otros aparatos no tripulados que permitirán inspeccionar el fondo del mar en busca de recursos.
Litvinenko aseguró en el marco del Foro Ártico que se celebra en Arjanguelsk (norte) que en el mundo no existe ningún submarino de su clase y que su construcción garantizará en el futuro la explotación de los recursos de la plataforma continental.
Según el plan maestro, el sumergible tendrá 135,5 metros de eslora, una velocidad de 12,6 nudos, una autonomía de navegación de 90 días, una profundidad máxima de inmersión de 400 metros y una tripulación de 40 personas.
El proyecto es obra de la corporación estatal Rubín, fundada en tiempos soviéticos y que se dedica a construir submarinos militares, tanto atómicos como diesel.
El presidente ruso, Vladímir Putin, presidirá mañana, jueves, el Foro Ártico al que asistirán los presidentes de Finlandia e Islandia.
Putin aseguró que, según los expertos, la plataforma continental ártica acoge casi una cuarta parte de los recursos energéticos del planeta, mientras el Ártico ruso alberga 1,6 billones de toneladas de hidrocarburos.