En San Juan, Boca jugaba ante San Martín en el estadio del Bicentenario como si estuviese en una pequeña porción de La Boca. ¿Por qué? Es que en los 11 encuentros anteriores en ese estadio había ganado 9 y sumaba una derrota y un empate. Esto se acentuaba si se tenía en cuenta que los hinchas visitantes colmaron dos de las cabeceras. En este marco el Xeneize acompañó las estadísticas y ganó 2-1 para sacarle tres puntos de ventaja a su perseguidor San Lorenzo.
El trámite del primer tiempo arrancó favorable para los dirigidos por los mellizos Barros Schelotto. Los visitantes se hicieron rápidamente con el control de la pelota y los sanjuaninos optaron por replegarse cerca de su área. Pero ambos equipos tuvieron acercamientos antes de que se concrete el primero para la visita.
A los 4' llegó la primera situación. Un centro de Gago al medio del área chica terminó en córner de Patricio Matricardi, quien salvó la llegada de Benedetto de frente al arco. Tres minutos después San Martín llegó por una jugada preparada que terminó con un remate largo de Gustavo Villarruel. Ardente se lució a los 14' al mandar al córner un tiro libre bien ejecutado por Gago. La pelota parada la había ganado Centurión a pura gambeta.
La más cercana para los locales fue a los 20', un remate a la distancia de Ezequiel Montagna. Dio la sensación de que Rossi la tenía controlada.
Al mejor estilo Carlos Tevez, a los 27' Pavón encaró desde la izquierda al centro del ataque en el borde del área y sacó un derechazo fulminante que entró en el ángulo. Inatajable.
A los cinco del complemento, un blooper de Rossi (confundido por un movimiento de Insaurralde) casi termina en el empate sanjuanino por no embolsar bien la pelota. El rebote le quedó a Emanuel Dening y su disparo se fue lejos, para fortuna del arquero. pero también para la desgracia de los locales, ya que en la primera contra que tuvo el puntero del campeonato mostró contundencia y estiró la ventaja.
Fue a los diez. Pablo Pérez le puso un pase espléndido a Benedetto, que corrió por la banda izquierda e hizo todo bien. El nueve (parado como puntero) cedió a Centurión (parado como un 9) en el medio del área y frente al arquero. Lo definió con dos toques: la paró de derecha y le pegó de zurda para el 2-0.
Si hasta el momento el encuentro había sido bastante parejo pero con un leve dominio de Boca, el segundo acentuó la tendencia. A los 12', Ardente volvió a lucirse. Gago vio el pique y desmarque de Silva en diagonal, cedió para que el lateral cabeceé y la reacción del aquero salvó el tercero. Centurión la tuvo de nuevo a los 20', pero su zurdazo se fue desviado cuando encaraba a la entrada del área grande. Siete minutos después, otra vez el ex Racing cedió en cortada a Benedetto, quien eludió al arquero y, cuando estaba con el arco vacío, disparó de zurda encima del travesaño. La velocidad le jugó en contra al goleador xeneize.
Pero si a algo nos tiene acostumbrado este Boca de Barros Schelotto es a no saber cerrar los partidos, aún si la lógica dice que ya no hay chances de revertir. Boca sufre en cada centro en su área y lo iba a pagar. A los 35', el árbitro anuló bien un gol de San Martín por posición adelantada. A los 43', Dening ganó en el área chica (sólo, sin marca) y de cabeza estampó el 1-2. El descuento ponía un suspenso impensado en el partido.
Insólitamente, y para enojo del DT y los hinchas, Boca no paró de desperdiciar situaciones en esos minutos finales. Primero con Zuqui, que tiró afuera un mano a mano tras una gran jugada de Bentancur. Después, con Centurión. Bou aguantó en el área un pelotazo largo, se la dio al 10 y este le pegó desviado, claramente agotado.
Boca quedó así con 37 unidades, a tres de San Lorenzo, único escolta. En tanto, los sanjuaninos suman 15, solamente por arriba de Belgrano y Arsenal.