En la provincia de Buenos Aires, en la Cuenca del río Salado, se inundaron más de 300.000 hectáreas productivas debido a las intensas precipitaciones que se registraron en los últimos días. De acuerdo a datos oficiales, en los últimos 10 días se acumularon en la zona entre 200 y 250 milímetros, lo que hizo que el agua empezara a circular a gran velocidad por la saturación de los canales que se desbordaron hacia los campos.
Unas de las ciudades más afectadas fueron Pila y Dolores. En Pila tienen unas 250.000 hectáreas anegadas mientras que en Dolores se encuentran comprometidas unas 80.000 hectáreas. En las últimas horas, abrieron las compuertas de los canales para aliviar el flujo de agua en su salida al mar a modo de ayuda a las hectáreas afectadas.
Esto se debe a las fuertes lluvias registradas en la zona alta de los canales, que luego se complicó por la saturación de humedad en los suelos, la subida de las napas y la falta de aireación necesaria para el secado.
Si bien desde el Servicio Meteorológico Nacional no pronostican grandes precipitaciones nuevamente en las ciudades de la provincia de Buenos Aires, aunque si estiman que los próximos días serán con alta humedad y poco sol.