Un estudio elaborado por la Red de Manejo de Plagas de la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid), en la previa a la siembra de la última campaña gruesa, estimó que las diversas variedades de Amaranthus ocupan más de 20 millones de hectáreas. Es decir, que la superficie cubierta por el denominado Yuyo Colorado es equivalente al área que cada año se siembra con soja en la Argentina. Los datos de 2020 aún no se han conocido, pero el fuerte poder de multiplicación que tiene esta especie –cada planta genera 300.000 semillas– invita a pensar que ha seguido expandiendo su territorio, con el agravante de que también se multiplican los casos de resistencias a diferentes principios activos y modos de acción.
Con la siembra de soja a punto de iniciarse, desde FMC recomiendan al herbicida Capaz como uno de los productos más eficaces y residuales para el control de Amaranthus spp. “Es ideal para malezas de hoja ancha como Yuyo Colorado, Cardo Ruso o Quinoa. Es un preemergente que tiene como principal ventaja su gran residualidad, así como también su excelente selectividad, lo que permite aplicarlo cerca de la siembra del cultivo”, afirmó Santiago Pascual, coordinador de Servicio Técnico en el Oeste de Buenos Aires y en La Pampa.
Otra fortaleza de Capaz es su capacidad de traspasar los rastrojos secos e incorporarse a la solución del suelo con apenas 15 a 20 milímetros de lluvia (según volumen de rastrojo). Asimismo, se trata de un producto banda verde y que no es foto lábil ni volátil.
Para Nicolás Bosco, coordinador de Servicio Técnico de FMC para Santa Fe, la utilización de
preemergentes en malezas como el Yuyo Colorado es clave porque es la manera más eficaz de controlar el banco de semillas. “Es un producto premium que se distingue por su selectividad, lo que lo hace muy seguro para aplicar en presiembra y hasta en preemergencia de la soja, y sobre todo en planteos de sojas de segunda. A su vez, por su formulación, posee una excelente capacidad de desprenderse del rastrojo con la primera lluvia posterior a la aplicación, para incorporarse rápidamente al suelo y estar en
activo funcionamiento”, coincidió Bosco.
Surcos libres de “yuyos”
Estas características, sumadas a su alta persistencia, son las que permiten que el cultivo arranque la campaña sin competencia de malezas y logre cerrar un surco limpio. En el mismo sentido opinó Sebastián Fernández, coordinador de servicio técnico de FMC en el Norte de Buenos Aires, Sur de Santa Fe y Entre Ríos. Fernández recordó que Capaz está elaborado a base de Sulfentrazone, una de las moléculas más activas y específicas para el control preemergente de Amaranthus, y que posibilita una aplicación próxima a la siembra que disminuye los riesgos de fitotoxicidad y que permite cerrar el surco sin utilizar aplicaciones de “rescate”.
También remarcó su solubilidad: “Es ideal para lotes en siembra directa con alto nivel de cobertura de rastrojos”.
Por su parte, Fabricio Díaz, coordinador de servicio técnico de FMC para el Sur de Córdoba insistió en que es sumamente importante controlar a esta maleza en barbecho o presiembra, puesto que una vez que los cultivos están emergidos, las estrategias de control se vuelven poco eficaces y más costosas. En esta zona también se utiliza en la previa de la implantación de maní. “Gracias a su selectividad, Capaz puede ser usado en presiembra sin ningún tipo de problemas, siempre que se sigan las indicaciones de dosis y recomendaciones técnicas de marbete. Se destaca por su gran persistencia y residualidad para que los cultivos lleguen limpios a cosecha, no haya mermas de rendimiento y que la maleza produzca menos semillas para la próxima campaña”, resumió Díaz.
En definitiva, es un producto adaptado a todas las regiones productivas del país, y con las características indicadas como ideales para ser el herbicida preemergente más elegido para el control de Yuyo colorado en los últimos años.