Agricultura

El girasol rindió en Tres Arroyos más de lo esperado

Los rendimientos del girasol en Tres Arroyos terminaron siendo, en general, mucho mejor a lo esperado teniendo en cuenta la intensa sequía que debió soportar el cultivo en la mayor parte de su ciclo. Si bien hay mucha dispersión en los resultados, y en promedio hay que hablar...

Los rendimientos del girasol en Tres Arroyos terminaron siendo, en general, mucho mejor a lo esperado teniendo en cuenta la intensa sequía que debió soportar el cultivo en la mayor parte de su ciclo. Si bien hay mucha dispersión en los resultados, y en promedio hay que hablar de rendimientos de entre un 20 y un 30% menos de la media histórica del distrito, para la mayoría de los productores las cosechadoras entregaron más kilos de los que estimaban.

“La cosecha fue sensiblemente mejor a lo esperado, porque en enero habíamos pensado que se había perdido todo, que no quedaba nada. Ha rendido entre 200 y 300 kilos menos por hectárea del promedio histórico, pero se pensaba que iba a ser mucho peor. Realmente sorprendió para bien”, explicó Juan Ouwerkerk, presidente de la Cooperativa Alfa.

“Estimamos que la cosecha ha sido entre un 20 y un 30% menor a la media, que teniendo en cuenta cómo veníamos en el verano, con un enero que no había llovido nada, es buena”, comentó el ingeniero Fidel Cortese.

La primera precipitación importante que recibió el girasol fue la primera semana de febrero -para muchos lotes ya era tarde- y en general, hasta ese momento el cultivo debió arreglársela con el puñado de milímetros que fue recibiendo desde que fue sembrado y, en los campos más profundos, con la humedad que podía obtener la raíz al explorar. “El girasol reaccionó en un año que venía muy complicado y rindió más de lo esperado”, insistió el titular de la Alfa.

En kilos

Como suele suceder en una campaña marcada por la falta de lluvias, en cuanto a rendimientos el girasol ofreció variantes para todos los gustos. A partir de los datos entregados por los productores y técnicos consultados, se podría estimar un piso de rinde de 1000 kilos y un techo de 3600 kilos, dependiendo del tipo de suelo y en qué momento el cultivo recibió la lluvia.

“Hay girasoles en la zona profunda con napas que anduvieron bien, entre 2700 y 2800 kilos. Mientras que en suelos con limitantes, con la tosca cerca, rindieron entre 1400 y 1500 kilos”, dijo el ingeniero Darío Tumini, asesor de ASP.

“Terminamos con rendimientos bajos, con promedios de 1200, 1500 y 2800 kilos en algún lote”, aportó el ingeniero Martín Christensen.

“En zona somera el girasol rindió un 25% menos que el año pasado con grano liviano. En la zona profunda lo que fue sembrado temprano anduvo bien, con rindes de 3100 a 3600 kilos y con grano pesado. Lo que se sembró más tarde está rindiendo un 20% menos, con rindes de 2500 kilos”, explicó el ingeniero Luciano Piloni, asesor técnico de la regional Tres Arroyos de Aapresid.

Crecimiento

Pese a un clima que no fue para nada beneficioso con el cultivo y cuando está a punto de concluir la cosecha, la producción de girasol mostró un crecimiento internaual del 32% y una suba del área sembrada del 39,3%. Así se desprende del informe presentado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, que indica que la producción alcanzaría los 3,3 millones de toneladas, un rendimiento apenas por debajo de la anterior campaña.

Las cifras proporcionadas por la Bolsa de Cereales, y que coinciden con las estimaciones proyectadas por el USDA (Departamento de Agricultura de Estados Unidos), revelan además que los rindes promedio fueron de apenas 20,1 qq/ha, marcándose una fuerte heterogeneidad intrazonal: en el sudeste de Buenos Aires las productividades físicas promedian los 20,4 qq/ha; en el sudoeste de Buenos Aires y sur de La Pampa alrededor de 20,1 quintales/ha; en el centro de Buenos Aires llegan a 21,8 qq/ha; en tanto los mayores niveles de rendimiento se evidencian en el oeste de Buenos Aires y norte de la Pampa, con 24,2 qq/ha.

Datos ASAGIR

Para los productores girasoleros del sur bonaerense, la última campaña fue una de las más complicadas. Sin embargo, en la zona de Tres Arroyos y otras cercanas, especialmente sobre la costa, se registraron los mejores rendimientos, según un informe de la Asociación Argentina de Girasol (ASAGIR).

En los suelos profundos de Pieres, cerca de Necochea, Sean Cameron logró 3000 kilos por hectárea. “Pero también hubo lotes de 1000 kilos”, aseguró Natali Lázzaro, presidente del Círculo de Ingenieros Agrónomos de Tandil.

La falta de lluvias se hizo sentir en la primavera y principios del verano. “Fue uno de los períodos más secos de los últimos 50 años. En octubre, noviembre, diciembre y enero cayeron unos 40 milímetros en promedio por mes. Mientras que en febrero llovieron unos 70 milímetros. En todo ese período necesitamos entre 80 y 100 milímetros mensuales”, contó Cameron.