Durante los últimos 20 días, en las zonas trigueras más importantes, provincias como Santa Fe, Buenos Aires y Entre Ríos tuvieron un cambio sustancial en su estado de reservas hídricas de cara a la próxima campaña fina; al igual que el Este, el Norte de La Pampa, Este y Sudeste cordobés. Sin embargo, gran parte de esa provincia encuentra sus perfiles descargados y, si bien los pronósticos son buenos, no son suficientes como para asegurar el cultivo sin que se aplique tecnología que ayude a llegar a la salida del invierno e inicio de primavera en forma satisfactoria.
El éxito del trigo pasará por utilizar una correcta estrategia de estimulación de crecimiento radicular y todas las herramientas de fertilización complementarias que permitan cubrir los déficits de microelementos. Estos cumplen funciones fundamentales dentro del metabolismo de las plantas; y en situaciones de bajas disponibilidad hídrica, al igual que en excesos dentro del perfil, no son absorbidos por el cultivo en forma satisfactoria. En casos de elementos como el Zinc, directamente persiste un déficit generalizado en todo el país.
Tanto cuando existe alta como baja humedad en el perfil, es necesario lograr un desarrollo radicular importante. En el primer caso, las plantas tienden a desarrollar un sistema radicular pobre ya que dispone de agua sin dificultad. Pero, ante un déficit temporal hacia el invierno, el cultivo puede pasar por problemas serios en momentos definitorios. Por otra parte, buscar una raíz potente en ambientes restrictivos permite aumentar su profundidad de exploración y la superficie de intercambio a partir de un mayor número de capilares radiculares.
Stimulate de Stoller estimula la producción de hormonas vegetales que aceleran y dan uniformidad a la germinación, activando la producción de pelos radiculares y favoreciendo el alargamiento celular de las raíces. Por otra parte, Mastermins Plus es un fertilizante foliar que se aplica al momento del macollaje y que aporta Nitrógeno, Fósforo, Potasio, Azufre, Zinc, Magnesio, Manganeso, Boro y Molibdeno, que le permiten a la planta realizar todos sus procesos metabólicos de crecimiento y de síntesis de sustancias de reserva en forma completa, favoreciendo el estado general del cultivo y manteniendo su potencial productivo, más allá de las eventuales condiciones adversas.