No es una paradoja sino justamente una respuesta a uno de los problemas que atraviesan los tambos, los costos. La cruza con jerseys le permite a los tamberos “achicar” a las holando –principal raza lechera y de mayor producción - y así gastar menos en alimentación.
“Por cuestiones como el valor de los granos o el problema de los caminos -para que llegue el alimento balanceado en el momento que se precisa-, muchos productores están volviendo a los tambos pastoriles. Ahí el Jersey les da la posibilidad de aumentar la carga por hectárea. Si comparamos por litros, el Holando es muy superior; pero en la ecuación de cosechar sólidos por hectárea, gana el Jersey”.
La afirmación la hizo el presidente de la Asociación Argentina de Criadores de Jersey, Agustín Robredo (vicepresidente de la Asociación mundial), quien afirmó que “actualmente entre 8 y 10 por ciento del rodeo nacional tiene Jersey”.
El crecimiento se puede medir en que la Argentina importó en 2016 alrededor de 100 mil dosis de semen de Jersey desde Nueva Zelanda, Estados Unidos y Canadá –en ese orden-, cuando a principios del siglo solamente había traído 5.000 dosis, de acuerdo a estadísticas del Senasa.
Incluso se está viendo un fuerte aumento este año porque “la leche –del Jersey- se está pagando hasta 15% más”, describió Robredo. Como se sabe, esta raza produce leche con más componentes sólidos (hasta 5% de grasa y 4% de proteínas), algo apreciado para la fabricación de quesos.
Además, la raza tiene otras virtudes como la facilidad y parto y la longevidad, lo cual permite tener un alto número de lactancias.