“La totalidad de las muestras sometidas a ensayo presentó valores inferiores a los límites de detección aplicables”, afirma la Autoridad de la Seguridad Alimentaria y Económica (ASAE), en un comunicado, refiriéndose al caso de sustancias ilícitas detectadas en Brasil.
Los problemas de la carne brasileña fueron registrados en el marco de la operación Carne Débil, que comprende un conjunto de establecimientos de producción de carne bajo la sospecha de prácticas fraudulentas, algunos de los cuales con la exportación autorizada para España.
Las acciones de vigilancia de la última semana en España involucraron a cerca de 40 inspectores y médicos veterinarios de la ASAE, que fiscalizaram 17 operadores económicos, incluidos los importadores de las empresas referenciadas en el Brasil, así como los distribuidores involucrados.
La autoridad afirma que fue “hecho con el control de la carne supuestamente sospecha, a fin de verificar la trazabilidad de los productos que entraron en el mercado nacional procedentes del Brasil.
La “evaluación macroscópica” es del, informa a la autoridad, explicando que hayan sido cosechas muestras que fueron enviadas al Laboratorio de Seguridad Alimentaria de la ASAE, para análisis físico-químicos y microbiológicos.
“Además de los productos controlados importados directamente de Brasil, fueron controlados productos procedentes del Brasil, que entraron en el mercado nacional a través de intercambios intracomunitarios en la Unión Europea”, añade.
El viernes, el portal de noticias G1 de Globo, citando un mensaje de correo electrónico de la Comisión Europea, ha anunciado que va a ser rechazada y devuelta al Brasil parte de la carne brasileña que está en el camino de los países de la Unión Europea.
El comisario europeo de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis, va a estar en Brasil el próximo lunes para reuniones con las autoridades brasileñas.
Brasil, considerado uno de los mayores exportadores de carne del mundo, intenta revertir una crisis de confianza sobre las carnes exportadas por el país desde la semana pasada, cuando la policía federal denunció la venta de productos ilegales realizados por 21 fábricas del sector de la carne, entre ellas las unidades de grandes compañías exportadoras como la BRF y JBS.
Brasil vende productos de origen animal para más de 150 países, contando con una cuota del 20% del mercado internacional de la carne (bovinos, aves y cerdos).
El sector de la carne del país mueve cerca de 14 mil millones de dólares (12,9 mil millones de euros) al año en exportaciones.