El riego es una herramienta y al mismo tiempo una política pública que puede cambiar un entorno agrícola, hacer viables explotaciones antes anti-económicas, elevar sustancialmente rindes y rentabilidad y, muy importante, sostener esas variables en el tiempo, con lo cual cambia absolutamente la perspectiva que de la inversión tiene el productor.
Es que los rindes aumentan no sólo por la aplicación de agua en momento y volúmenes oportunos y adecuados, sino porque el productor tiende a colocar bajo el hongo de riego más implantación con más tecnología.
Estas consideraciones acrecientan su importancia cuando se trata de pequeños y medianos productores de cultivos tradicionales, productores de hortalizas y ahora también productores arroceros. Efectivamente, en la producción de arroz el manejo del agua es uno de los factores críticos. Entonces aquí el riego es una herramienta notable para mejorar la rentabilidad por el lado de bajar sustancialmente el costo de la producción y morigerar el impacto sobre el suelo.
Desde Pampa Riego informaron que están en una fase de pruebas para producir arroz bajo riego con pívot, en directa, con una sola labranza. “Para este desarrollo hemos presentado el proyecto como desarrollo innovador en el programa de ANR del Fontar en la Agencia de Ciencia y Tecnología del Ministerio de Tecnología de la Nación. No hay dudas de que la tecnología de manejo funciona tal como ya ha sido probada en otros países de gran experiencia como Brasil” comunicaron.
Lo que se está probando es la tracción en terreno barroso, y lo están haciendo con orugas con cinta de caucho, orugas de chapa, ruedas de plástico Rhinogator y sistemas duales para encontrar la manera más confiable de ‘calzar’ al pívot en las arcillas entrerrianas.
Según un comunicado de la empresa “confían en encontrar la solución y darle a la producción arrocera una oportunidad de revolucionar verdaderamente al sector y una perspectiva de crecimiento que la saque del estancamiento que muestra desde hace más de una década”.
La experiencia en Jubileo
En Jubileo, una explotación de la familia Odiard y el Ing O. Cacho Henderson a solo 17 km de San Salvador, Entre Ríos, están trabajando en la producción de arroz en siembra directa y regado con aspersión mediante un pivot de 20 hectáreas.
El arroz en directa les permitió pasar de arroz convencional, donde se realizan 6 labranzas, a solo una labranza en la siembra, utilizar posiblemente la mitad de agua y solo un 60% de la energía requerida por la producción convencional. Además pudieron fertilizar con un sistema de ferti-riego y no con aplicación aérea con aviones pulverizadores. Un valor muy importante es que libera al productor de toda la inversión en equipamiento para labranzas del arroz, y además le permite planificar un cultivo de invierno eficiente. Si el arroz no tiene el valor esperado, esta herramienta brinda la posibilidad de hacer bajo riego un cultivo convencional.
Con esta técnica que consiste en mantener al cultivo con el perfil saturado, no inundado, el arroz puede tener cosechas muy parecidas a los cultivos convencionales.
En una provincia como Entre Ríos donde en la última campaña han dejado de cultivar arroz 70 productores, Pampa Riego afirmó que “brinda una solución para que los productores logren seguir en el sistema productivo arrocero sin ataduras y con nuevas posibilidades productivas. También muestra cómo el riego, una vez más, hace más eficiente la producción en las economías regionales, tal como lo ha logrado en la producción de papa y la multiplicación de híbridos. Queda un camino por hacer con el arroz, la producción de alfalfa para mega-fardos, el ajo y toda la horticultura a escala; todo esto es parte de un nuevo horizonte productivo para la Argentina”.