Regionales

Instalan una nueva plataforma en el aeropuerto de Tucumán para la exportación de arándanos

La producción de arándanos, como economía regional, fue incorporada al Plan Belgrano. Y el Ministerio de Transporte nacional proveyó a la provincia de $90 millones para la construcción de una nueva plataforma en el aeropuerto Benjamín Matienzo de Tucumán, que permitió aumentar la capacidad de carga y el...

La producción de arándanos, como economía regional, fue incorporada al Plan Belgrano. Y el Ministerio de Transporte nacional proveyó a la provincia de $90 millones para la construcción de una nueva plataforma en el aeropuerto Benjamín Matienzo de Tucumán, que permitió aumentar la capacidad de carga y el tipo de aeronaves que operan, señaló a Télam Jose Ascarate, de la Unidad Plan Belgrano de la jefatura de Gabinete.
Precisamente estas reformas -Tucumán había aportado ya una cámara de frío en el aeropuerto- permitieron alcanzar una exportación récord, pero con la paradoja de que se trata de un año malo en ganancias."Los productores perdieron plata, nosotros valoramos muchísimo lo que se hizo en Tucumán pero por otro lado hizo que se generar la falsa creencia de que el sector estaba bien", sostiene Carlos Stabile, titular de la cámara que nuclea al sector.
Las exportaciones actuales de arándanos se realizan básicamente desde Tucumán y Ezeiza, a través de la contratación de las bodegas de los vuelos comerciales, de los vuelos de carga, y de los vuelos chárter que transportan sólo arándanos.
"La ampliación de la plataforma en el aeropuerto de Tucumán permitió ampliar la carga que se realiza de día y tener menor riesgo de que la misma se contamine de insectos. El año pasado tuvimos un serio problema con Estados Unidos con un envío que llegó contaminado de insectos por haberse realizado la carga de noche. Este año no tuvimos ningún problema al respecto", ponderaron los productores del sector.
Otra de las medidas que resultaron favorables, aunque los efectos se observan en cámara lenta, fue la eliminación a las barrera de las importaciones. "En la anterior gestión, al haberse prohibido prácticamente las importaciones, los vuelos llegaban vacíos, y al no tener carga los costos se encarecían, ya que estábamos pagando la idea y la vuelta. En el mejor de los casos, llegaba un vuelo desde el norte con carga hasta San Pablo, pero el tramo hasta la Argentina lo cubríamos nosotros. Esta situación mejoró, aunque aun falta", culminó Stabile.

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