Los viñateros sanjuaninos volvieron a insistir en su lucha contra el método de bromuración de la uva de mesa como precaución sanitaria, pero esta vez para que sea eliminada en las barreras sanitarias dentro del país y sustituida por otros controles que no tengan efectos nocivos. El pedido surgió de la Asociación de Viñateros Independientes (AVI) que dirige Juan José Ramos, pero al enterarse también le dio su apoyo la Cámara de Productores Vitícolas que preside José Molina.
Sucede que tras achicarse las ventas de la uva al mundo, el sector quiere empezar a comercializarla en destinos del mercado interno no tradicionales como son las provincias de la Patagonia -Neuquén y Río Negro- y también La Pampa. Pero al iniciar este año contactos con la zona advirtieron que para ingresar a esos mercados se exige la bromuración previa para prevenir el ingreso de la plaga "Mosca de los Frutos". Los valles cultivados de San Juan son áreas que el Senasa tiene bajo control por la existencia desde hace años de las dos variedades de la plaga, la mosca del Mediterráneo (Ceratitis Capitata) y la mosca Sudamericana (Anastrepha fraterculus). En cambio las provincias del Sur están libres de la plaga (ver infografía).
Hace 10 días la Asociación de Viñateros Independientes (AVI) que dirige Juan José Ramos, envió una nota al Senasa solicitando que se indique en qué destinos del país se exige la bromuración para comercializar la uva de mesa de San Juan y los motivos. Esperan ser convocados por las autoridades para discutir la situación. Desde la AVI proponen que el procedimiento sea sustituido por otros controles, tales como la inspección cuarentenaria por parte del Senasa en los viñedos cuya producción vaya a ser vendida a otras provincias, o bien implementar tratamientos de la uva empacada con ozono, o bien con temperatura de 1º bajo cero durante 24 horas en el frigorífico, antes de ser enviada a destino. ""Hemos tenido conocimiento de que hay lugares que recurren a este mecanismo con éxito sin tener que llegar a la bromuración que provoca deterioros en la calidad de la uva", dijo Ramos.
También agregan que el bromuro de metilo ha sido prohibido en algunos países por las consecuencias negativas para la salud, y recuerdan que Argentina se comprometió a nivel mundial a restringir o eliminar el uso de bromuro de metilo en los productos agrícolas, por el daño que genera en la capa de ozono. Por último, añaden un pedido de profundizar la lucha contra la Mosca de los Frutos (ver recuadro). La bromuración es un dolor de cabeza para el productor de uva de mesa. Además de su costo -1 dólar por caja- juran que es mala para la calidad del fruto. El sistema debutó en el año 2012 cuando Brasil comenzó a exigirla tras encontrar un ejemplar del insecto "Brevipalpus Chilensis" en un envío mendocino. Ahora la queja se reavivó al percatarse que también fue incorporado en las barreras fitosanitarias del Sur argentino.
José Molina, que dirige la entidad que nuclea principalmente a productores de uva en fresco, mostró satisfacción porque la AVI se haya sumado al pedido de eliminación de este tipo de trabas que según dijo, ellos ya viene reclamando. Molina, quien integra el directorio de la Corporación Vitivinícola y junto al resto de miembros estuvo en la reunión con el presidente Macri el mes pasado, dijo que ese fue un reclamo del sector. ""Nos pone muy contentos que los productores de AVI pidan esto", dijo ayer; y agregó que su entidad solicitó a la Sociedad de Investigación, Desarrollo e Innovación de Coviar que se desarrolle una técnica de bromuración para no tener un periodo poscosecha tan malo y que afecta la calidad.
La lupa en la mosca
El reclamo viñatero también apuntó al programa de erradicación de la Mosca de los Frutos. En San Juan sólo el Valle de Calingasta es zona de "baja prevalencia", que significa que se detectan ejemplares de moscas en las trampa por día (MTD) menores a 0.010. El resto de valles sanjuaninos están "bajo control" porque el MTD es mayor a 0.010. ""Pedimos que se profundice el combate a esta plaga porque hace años que no mejoramos estos estatus sanitarios", criticó Juan José Ramos. Añadió que la entidad tiene derecho a solicitarlo porque parte de los recursos con los que se encara el combate provienen de los productores. Cada vez que salen productos vitícolas de la provincia se debe pagar una oblea en las barreras fitosanitarias destinadas a este fin, ""pero no se ven los resultados", agregó.
El efecto con Brasil
En los últimos cinco años cayó un 80% la exportación de uva para consumo en fresco sanjuanina a Brasil porque la bromuración hace que la uva llegue en malas condiciones. Brasil era el principal país comprador de la uva, llegando a absorber un tercio de lo producido en los viñedos locales.